Cantinflas, fotógrafo ambulante, es capturado por unos gángsters cuando trataba de coger unas flores de su novia, Consuelo. Los gángsters le han confundido con el ayudante del doctor Penongo, científico que ha descubierto la fórmula de una nueva bomba atómica. Mientras tanto, Penongo ha sufrido un accidente de automóvil y ha perdido la memoria...
Cantinflas se desempeña como barbero, pero suele recibir lecciones de leyes de un anciano vecino, el cual le propone asesorarlo para que defienda a los más desfavorecidos del barrio en los tribunales. Tanto es el éxito alcanzado por Cantinflas en su gestión, que obtiene los votos necesarios para ser diputado.
El retirado agente 777 es ahora un despistado bombero, que un día recibe la visita de su pequeña ahijada, cuya madre murió recientemente en la selva. Después de trabajar en algunos incendios, decidió renunciar y regresar a la policía, porque es menos peligroso. Todo va bien hasta que una pandilla de malhechores secuestra a la niña, debido a una herencia monetar